8.3.03

Guerra

Ayer se realizó un homenaje a la primera víctima mexicana de la guerra que el Sumo Sacerdote Bush ha impuesto al mundo. Rodrigo González Garza, nativo de Sabinas Hidalgo, Nuevo León, fue uno de los cuatro soldados que hace unos días murieron cuando su helicóptero se estrello durante un entrenamiento en Kuwait. Se le hizo una ceremonia con todos los honores militares en San Antonio, antes de que sus restos salgan a descanzar en su tierra natal. "El Ejército de Estados Unidos, el país mismo, entrega a ustedes esta bandera en señal de respeto y gratitud", le dijeron a la familia. La ironía reside en que el compatriota murió en una guerra que aun no había comenzado y por un país que no era el suyo.

Hace unos días leía algunas notas que la verdad no me sorprendieron mucho: el ejercito de Estados Unidos comenzó a enviar cartas de reclutamiento a jovenes de mexicanos que viven allá prometiendo una carrera universitaria y la posible legalización de su estatus migratorio si accedian a entrenarse y luchar en Irak. Me llegan ecos de la secuencia de Operation Human Shield en la película de South Park. Supongo que la "invitación" no será exclusiva para los mexicanos... después de todo, cualquiera sirve para ser carne de cañon.

No hay comentarios.: