Caminar y caminar... hoy paseamos por el barrio gótico de Barcelona. En realidad me fue bien: nos metimos al "lado oscuro" del barrio, una serie de callejuelas estrechas y oscuras que forman el gueto de africanos y asiáticos en Barna. Por lo que vi, vendría siendo el equivalente barcelonés del barrio madrileño de Lavapiés que tanto me gusta.
Gabriel nos guió buscando un bar que le gusta, y mi madre quería llegar a una plaza que recuerda de un viaje de hace tres años. Encontró el barrio muy cambiado, aunque después descubrimos que no ha cambiado nada, sino que Gabriel nos llevó por el lado pobre del barrio. Algunas de las calles me recordaron muchísimo a Marrakesh, aunque los contrastes están a la vuelta de cada esquina. Carnicerías islámicas, locutorios, tiendas de productos asiáticos, cafeterías y muchas peluquerías. En una de las tiendas de alimentación encontramos chile de árbol fresco que compramos para hacer unas salsas y Lesslye compró también garam masala. También vimos un par de videoclubs llenos de películas de Bollywood, Indonesia, asia, e incluso nos enteramos de que el próximo sábado a medianoche se exhibe una película hindú; planeamos ir Gabriel, Pedro Brenner y yo, ya veremos si se puede. Tomé muchas fotos (ya subiré algunas) y me quedé con ganas de regresar.
Más tarde, después de unas copas en Las Ramblas, fuímos al lado "nice" del barrio. Preciosas las calles, aunque ya muy "esterilizado": Zara, Mango, Pepe Jeans, más tiendas y bares muy fashion. Siempre me ha ido mejor lo decadente y en estos lugares no me siento muy a gusto. Pero el paseo valió la pena. Terminamos frente a la catedral -obra de Gaudí- disfrutando de la noche.
22.10.02
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